La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice textualmente, “El cambio climático es especialmente relevante porque se espera que altere no solo el medio ambiente natural como consecuencia de inundaciones o sequías, sino también el medio urbano como resultado en el cambio de la utilización del suelo”.
Estamos acostumbrados a ver plagas durante las épocas cálidas del año, y con la llegada de las bajas temperaturas dejamos de verlas, pero mucho más lejos de esta realidad, estas no desaparecen en invierno, sino que se esconden. Buscan resguardarse del frío y el mejor lugar al que acuden son las casas y locales donde tenemos temperaturas más suaves.
Para prevenir que estos intrusos invadan nuestras casas debemos tomar medidas como sellar cualquier hueco que tengamos, no dejar comida a la vista y vigilar zonas donde el agua pueda quedar acumulada, ya que sería un festín para estas plagas. Esto es importante porque los daños causados pueden ser importantes y costosos.
Principales plagas que podemos encontrar:
- Cucarachas: Son de lo más frecuente. Pueden aparecer en cocinas, comedores y baños. Solo necesitan un lugar húmedo, agua y alimento. Conllevan consecuencias como la contaminación de alimentos, por lo que debemos dejar estos bien guardados. Es importante acabar con ellos en cuanto se detecten.
- Roedores: Son el mejor ejemplo, ya que buscan lugares cálidos y se esconden con facilidad. Si encontramos alimentos comidos o roídos, junto con sus excrementos, son los principales factores que les delatan. Provocan serios estropicios, además de propagar numerosos patógenos y contaminar alimentos. Es importante tapar cualquier grieta, mantener los alimentos bien guardados y mantener las zonas limpias.
- Termitas: Mantienen su actividad durante todo el año, ya que su actividad depende de su temperatura corporal. Esta plaga es muy silenciosa, lo que es un gran problema, ya que cuando se descubre, los daños ya son cuantiosos. Existen varios factores para intentar prevenirlas, como evitar las humedades.
- Chinches: Se adaptan a cualquier temperatura, por lo que con la llegada de las bajas temperaturas no desaparecen. Aparecen principalmente en los dormitorios, pero su propagación es muy extensa.